viernes, 10 de septiembre de 2010

Mi ciudad


Hace poco más de un año que cambié mi residencia y abandoné la que había sido mi ciudad de toda la vida.

A mi regreso, lo primero que he hecho ha sido pasearme por sus calles con la mirada curiosa del que visita un sitio por primera vez.

Tengo que admitir que, por desgracia, no solemos dar la importancia que se merece al lugar donde habitamos. Lo cotidiano no nos deja apreciar toda su belleza y encanto.

La recordaba bonita y acogedora, pero no tanto. He paseado hasta la saciedad por sus calles para empaparme de su bullicio, luminosidad, aromas y alegría. Sin duda, he vuelto a casa.











La primera imagen que se tiene de Palma cuando se llega por la Autopista del Aeropuerto.

No hay comentarios:

Publicar un comentario